Todos los humanos tenemos nuestra identidad, nuestra personalidad, nuestra forma de ser. La identidad es aquello que nos define como personas, que nos permite reconocernos a nosotros mismos y diferenciarnos de los demás. Nos sentimos integrados y damos sentido a nuestra vida en función de lo que somos, de quienes somos.
Pero, ¿es solo una nuestra identidad?
Son muchos y muy variados los ámbitos de nuestra vida que nos ayudan a conformar la idea que tenemos de nosotros mismos, y no en todos nos definimos de la misma forma.
Son distintos los roles que desempeñamos en distintos ambientes donde nos movemos. Las máscaras que nos ponemos para funcionar dependiendo de donde nos encontremos.
Por ejemplo, como madre, puedo definirme como cuidadora, mientras que como pareja o hermana, me sienta acompañante. Puedo ser habladora con mis amigos, pero callada en mi lugar de trabajo. Puedo definirme como capaz a nivel profesional, pero incapaz como corredora de fondo.
También aquí entran en juego las opiniones que otros tienen de nosotros. Cómo nos ven o cómo esperan que nos comportemos. Las expectativas y exigencias de los demás moldean nuestra forma de percibirnos casi tanto como lo hacen nuestras propias. En ocasiones, incluso más.
Los adjetivos que utilizamos para definirnos en distintas áreas ayudan a encajar las piezas del puzle del que está hecha nuestra autoimagen y nuestra autoestima.
Definirnos en negativo pueden causar verdaderos problemas de autoestima. Somos mucho más que las palabras con las que nos definen otros o con las que nos definimos. Poder desgranar nuestros distintos roles, las distintas formas de funcionar que tenemos, ayuda a ver mejor los aspectos que nos gustan de nosotros y a definirnos de una manera más constructiva que nos haga crecer como persona.
Para tener una buena autoestima primero tenemos que conocernos bien y, aunque suene raro, «caernos bien» a nosotros mismos.
Si quieres conocerte mejor y trabajar para «caerte bien» y mejorar tu autoestima, escríbenos.
Irene López Romero
CV11092
Irene.lopez@lucentumpsicologia.com
